jueves, octubre 29, 2009

Stanley Podrido....check my brain

Hoy no todo huele igual, ni sikiera el mágiko sakito filosofal ekuatoriano ke pende del retrovisor. La podredumbre levita en el ambiente, sentado largamente en la butaka delantera espero el momento preciso para aktuar. Pero no llega, tampoko las tiernas vibraciones del tetracilíndriko transmiten ese masaje vitalizante y narkotizante en mi espalda. Pareciera ke nada podrá revertir el askeroso proceso de deskomposición. Mi kuerpo a komenzado a desaparecer.
No existen kolores, la ciudad siempre grisasea enarbola una fagocitante mancha oskura y pesada, lluvia, neblina y hedor se mezklan en un extraño mousse negruzko. Trato de salir, no es posible estamos en primavera... la "ciudad" debería estar distinta. Acelero rápido por el viejo pasaje de adokines, algunos me tratan de hacer señas entre la niebla.. es kuando lo eskucho, por primera vez.
De entre mis viejos parlantes, los arrastrantes riffs me sakuden, es un aparecido, un viejo mountruo konocido y ya muerto ke vuelve a tironearme a su triste soledad.. pero lo peor, estaba por venir.
Su primera palabra la pronuncia en mi cara , resucita real y tangiblemente, su tufo hediondo y deskompuesto desfiguran mi rostro en una mueka de asko, arkada... Laney se sienta en mi butaka derecha y comienza su enfermiza balada de hombre vivo-muerto, me mira, podrido, olvidado, y desechado por dias sin sikiera ser extrañado. Me canta.. su drogada y melosa voz nuevamente me llevan a campos sombrios y boskes encantados y mágikos.. irreales , la mano izkierda al parecer se le eskapa, pero no eskatima en esfuerzos y logra asirme fuertemente de mi brazo.
- Vamos.. ya está todo perdido... eres un maldito.